Android y iOS son los reyes de los sistemas operativos de smartphones en todo el mundo. De forma conjunta, el sistema operativo de Google y el de Apple acumulan el 91.1% de todos los despachos de smartphones durante el cuarto trimestre de 2012. Según International Data Corporation (IDC), todos los fabricantes de smartphones Android y Apple han vendido un total de 207.6 millones de unidades en todo el mundo durante el trimestre señalado, esto es un 70.2% más respecto a las 122 millones de unidades vendidas el año anterior. En el año 2012, Android y iOS de forma conjunta acumularon el 87.6% de los 722.4 millones smartphones despachados en todo el mundo, frente al 68.1% de los 494.5 millones de unidades despachadas en el año 2011.
Sin embargo, pese a que de forma conjunta la participación de Android y iOS ha crecido, no significa que ambos han crecido. De un lado, Android continuó su trayectoria ascendente en general, llegando a tener un crecimiento de tres dígitos para el año 2012. Siendo más preciso, Samsung fue el que más contribuyó al éxito de Android, representando el 42% de todos los despachos de smartphones Android en el año. De otro lado, iOS registró otro trimestre y otro año con un crecimiento de dos dígitos por una fuerte demanda por el iPhone. Sin embargo, año tras año el crecimiento de iOS se ha ralentizado en comparación con el mercado en general.
Finalmente, hay que mencionar que fuerte preferencia que BlackBerry tiene sobre los usuarios empresariales se ha aflojado y su popularidad dentro de los mercados emergentes ha disminuido por la competencia como resultado de la decisión de la compañía de posponer el lanzamiento de BB10 para el 30 de enero de 2013. En lo que respecta a Windows Phone/Windows Mobile, este ha crecido en el cuarto trimestre y en el año, básicamente impulsado por el fuerte compromiso de Nokia con la plataforma. Al mismo tiempo Nokia se ha beneficiado de esta relación fuerte con Microsoft ya que representaba 76% de todas los despachos de smartphones con Windows Phone/Windows Mobile. Linux se mantuvo igual con respecto al año anterior.