El Instituto Brasileño sobre Políticas y Leyes de Software(IBDI, por sus siglas en inglés) presentó una demanda colectiva contra Apple por «obsolescencia programada» en el iPad 4 con respecto al anterior modelo, en Nuevo (viejo) iPad. El instituto cree que la compañía estadounidense ha llevado a cabo prácticas competitivas desleales debido a que las innovaciones técnicas del iPad 4 podrían haberse aplicado en el iPad 3.
Cabe recordar que este hecho se produce solo unos días después de que las autoridades de patentes de Brasil golpearon fuertemente a Apple, al anunciar que el nombre de iPhone en Brasil pertenece a una compañía local llamada Gradiente SA (que curiosamente produce teléfonos con Android), y no a la gigante mundial tecnológico.
Se denomina obsolescencia programada a la planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio de modo que, tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante o por la empresa de servicios, el producto o servicio se vuelva obsoleto, no funcional, inútil o inservible.
El Instituto Brasileño sobre Políticas y Leyes de Software considera que Apple ha llevado esta práctica a cabo en el iPad de cuarta generación respecto al iPad 3. Según recoge el diario brasileño Jornal do Comerciao, la compañía de Cupertino habría tenido otras opciones antes de lanzar un nuevo dispositivo al mercado que dejase obsoleto el anterior iPad.
Apple presentó su nuevo iPad de cuarta generación el pasado mes de octubre en un evento en el que también dio a conocer su esperado iPad mini. La llegada del nuevo iPad se produjo tan solo seis meses después de lanzar la tercera generación, incorporando pantalla retina display y mejoras en cuanto a procesador, cámara y conector.
El IBDI cree que Apple llevó a cabo «prácticas comerciales desleales» ya que podía haber incorporado las mismas características del iPad 4 en el iPad 3. Por ello, buscan que los usuarios del iPad de tercer generación en Brasil sean compensados.
Otra cuestión planteada por el instituto en su demanda es que Apple acabó con la línea de producción del iPad de tercera generación sin una comunicación adecuada en el mercado brasileño. «Los consumidores compraron equipos de gama alta sin saber que se trataba de una versión ya obsoleta«, asegura el abogado de IBDI Sergio Palomares. Por el momento se desconoce si esta demanda ha sido admitida por los tribunales.
Tomado de: Europa Press