Parece que el uso militar o la diversión no es todo en el futuro de los drones. Un grupo de arqueólogos de Perú ha decidido aprovechar esta tecnología para luchar contra el expolio y el maltrato de los yacimientos arqueológicos de Machu Picchu, lo cual sin duda es una buena, pero no nueva idea. Por ejemplo, se han usado previamente para tomar fotografías aéreas o para escanear una zona geográfica y crear un modelo 3D basado en capturas aéreas. Sin embargo, ahora se pretende ir más allá. El objetivo es usar los drones en tareas de vigilancia con el objetivo de proteger yacimientos arqueológicos de posibles expolios o malos tratos provocados por la explotación minera (sin control) o por efectos de la especulación urbanística (sin respetar el entorno o hallazgos arqueológicos).
Y es que precisamente la actividad minera informal y la construcción desordenada de las ciudades podría terminar dañando nuestro patrimonio, como ya ha sucedido. Según los arqueólogos, aún se está trabajando, cerca de Lima cerca en la ciudad Pre-Inca de Yanamarca, en los restos de una pirámide de 5,000 años de antigüedad que fue dañada por una constructora.
El Ministerio de Cultura de Perú está impulsando esta idea para no solo proteger los yacimientos arqueológicos, sino que también con la finalidad de tener una documentación fotográfica (y con modelos 3D) de todos los lugares, por si alguna vez es necesario restaurar algo del patrimonio dañado. Cabe destacar que el Gobierno correrá con los gastos de adquisición de los drones. Según los datos del Ministerio de Cultura, Perú tiene alrededor de 13,000 yacimientos arqueológicos a proteger y solamente 2,500 están bien protegidos y delimitados, así que hay un gran espacio de trabajo para este buena idea de usar los drones en la protección del patrimonio cultural del Perú.
Vía: Alt140
Fuente: The Guardían