La rivalidad entre empresas puede traer riesgos para una industria, ya que podría terminar disminuyendo las ganancias del sector, o al menos eso podría preocupar al algunos. En Estados Unidos los operadores móviles parecen haberse enfrascado en una batalla que ha preocupado a Wall Street.
La historia viene así. Después de varios meses de movimientos agresivos de T-Mobile US para atraer a clientes de otras operadoras, el segundo operador del país, AT&T, contraatacó el 3 de enero ofreciendo pagar a los clientes que se cambien desde T-Mobile. Y eso no fue todo. Unos días después, la tercera operadora, Sprint, prometió grandes descuentos para grupos familiares y de amigos. En respuesta a ello, T-Mobile elevó el miércoles la apuesta diciendo que pagaría los costos de salida para los traslados a su compañía. Cabe destacar que las acciones de Sprint y AT&T se produjeron después de que T-Mobile, la cuarta operadora del país, logró un crecimiento de tres trimestres consecutivos luego de cuatro años de pérdidas.
Esto parece haber sorprendido a diversos analistas ya que los altos niveles de competencia no son la regla en este sector que parece haber estado acostumbrado a imponer su voluntad a los consumidores, temiéndose que esta guerra de precios pueda desembocar en una pérdida de miles de millones en ingresos.
Los inversores esperaban que AT&T y el líder del mercado, Verizon Wireless, fueran capaz de zafarse de los movimientos de T-Mobile, debido a su alta participación de mercado (cerca de dos tercios del mercado entre ambas). Lo curioso es que AT&T había permanecido al margen durante meses pese a las críticas públicas a sus servicios de T-Mobile, sin embargo los ejecutivos de dicha compañía no pudieron aguantar más y decidieron entrar a la pelea, por lo cual los analistas se preguntan: «¿Cuánto pasará hasta que reaccione Verizon?». Incluso, se espera que la competencia se acentúe este año, ya que Sprint, propiedad en un 80% del japonés SoftBank, podría tratar de atraer de nuevo a los clientes que perdió por problemas técnicos.
¿Qué han dicho los ejecutivos de los operadores? El día previo a la última oferta de T-Mobile los ejecutivos de Sprint y Verizon hicieron caso omiso a las preguntas sobre el movimiento de AT&T, de otro lado, el presidente ejecutivo de Sprint, Dan Hesse, sugirió que los movimientos de sus rivales para captar clientes serían fugaces.
Lo que los analistas esperan es que esta batalla pasará la cuenta una vez que los consumidores decidan pensando en sus bolsillos y los operadores muestren hasta dónde van a luchar y cuanto pueden aguantar. Lo que preocupa a algunos es que el decreciente ingreso medio por usuario (ARPU) a causa de los descuentos puedan ser superiores a los beneficios por la llegada de nuevos clientes.
Nota original: Rauters