Google nuevamente enfrenta una acusación por la realización de conductas anticompetitivas relacionadas con Android, en esta ocasión en Estados Unidos. La acusación refiere que Google intenta monopolizar el mercado de búsquedas en internet, específicamente desde dispositivos móviles (smartphones y tabletas) haciendo uso de la privilegiada posición que le otorga la popularidad de Android.
Uno de los puntos claves en la acusación es el referido a los contratos «Mobile Application Distribution Agreements (MADAs)», los cuales Google mantiene con casi todos los fabricantes de dispositivos Android. A través de los MADAs, Google establece que los fabricantes de dispositivos con Android, como Samsung o HTC, incluyan un conjunto de aplicaciones en sus dispositivos, como YouTube, y como no, la tienda de aplicaciones Google Play Store. Sin embargo, debido a estos acuerdos los fabricantes deben también incluir otras aplicaciones más específicas, como Google Search (Búsquedas), estableciéndola como la aplicación predeterminada para las búsquedas.
La demanda señala también que los consumidores no saben como cambiar de proveedor de búsquedas, por lo que esta conducta de Google le aseguraría a Google el dominio en las búsquedas desde dispositivos móviles en detrimento de todos sus competidores. Asimismo, la denuncia señala que la calidad de las búsquedas podrían mejorar si se permite a los fabricantes elegir otro proveedor de búsquedas. También se afirma que si se permitiera a los otros proveedores de búsquedas competir por aparecer por defecto en los dispositivos elaborados por los fabricantes (con el pago respectivo), el precio de los dispositivos podría ser subsidiado por los fabricantes, disminuyendo su costo para los consumidores.
Finalmente, según la denuncia el monopolio que actualmente mantiene Google en las búsquedas en internet en los Estados Unidos (cerca del 90%) no se debe a razones de eficiencia, sino a una estrategia anticompetitiva.
Por su parte, Google ha señalado que cualquier puede utilizar Android sin Google, y Google sin Android, refiriéndose con ello a que en efecto, al ser Android un sistema operativo, los fabricantes podrían instalar otras tiendas de aplicaciones alternativas a Google Play Store (que hay varias), y no están obligados a firmar los MADAs. De hecho, además de tiendas que se pueden instalar en los dispositivos con Android, como AppBrain, existen fabricantes que no usan los servicios de Google ni su tienda de aplicaciones, como Amazon y Nokia que utilizan forks de Android. Esto por ejemplo no ocurre con Windows Phone y mucho menos con iOS de Apple, donde solo se pueden instalar aplicaciones desde las tiendas oficiales. Asimismo, Google señala que desde la introducción de Android se ha beneficiado a los consumidores, dándoles más alternativas y a precios económicos.
Cabe destacar que hace poco más de un año Google fue acusada en la UE por prácticas relacionadas a la imposición de la instalación de sus aplicaciones en los smartphones con Android.
Fuente: CNET / Yahoo Finanzas