Samsung Electronics ha sido el número uno a nivel mundial en cuanto a la fabricación de televisores por 12 años consecutivos. Durante ese tiempo, los televisores de la marca han dejado la valla alta gracias a su diseño, precisión de color y calidad de imagen, ofreciendo a los consumidores experiencias visuales cada vez más inmersivos y ofreciendo experiencias visuales en entretenimiento.
En el 2006, durante el inició de la carrera de Samsung como líder del mercado, la compañía sentó las bases para una nueva era de diseño de TVs con la presentación de Bordeaux, una pantalla LCD con una forma elegante, inspirada en una copa de vino. Desde entonces, los televisores Samsung se han convertido en sinónimo de la combinación de diseños refinados, como el de Bordeaux, con las innovaciones más novedosas que llevan la experiencia de visualización a nuevas alturas.
Por ejemplo, en el 2009, Samsung presentó el primer televisor LED de borde iluminado del mundo, el cual además de ser increíblemente delgado, introdujo a los consumidores a un nuevo nivel de calidad de imagen. A ese desarrollo innovador le siguió en el 2010, el primer televisor LED 3D del mundo, que abrió la puerta más posibilidades de entretenimiento inmersivo en 3D. Ese mismo año, Samsung presentó la primera tienda de aplicaciones para televisores inteligentes del mundo, y en 2011, la compañía lanzó Smart Hub, el interfaz de usuario intuitivo de sus Smart TV.
Otras de las innovaciones en las que Samsung fue pionero, demostrando que siempre estuvo a la cabeza en el desarrollo de las TV curvas, incluyen los lanzamientos del primer televisor OLED del mundo en 2013, y los primeros televisores UHD curvos y flexibles en 2014.
Los nuevos televisores QLED de Samsung representan el punto máximo de esta historia de innovación. La combinación de estética Premium y realidad visual ha llevado a muchos consumidores a reconsiderar cómo evalúan las cualidades inmersivas de un televisor.
Con Bixby y la tecnología de Quatum Dot (puntos quanticos), los televisores QLED ofrecen una experiencia de visualización definida por controles amigables y una visualización envolvente. Su capacidad para proporcionar un volumen de color del 100% les permite producir matices mucho más brillantes y más profundos, permitiendo que el contenido se muestre de la manera que los creadores deseaban.
Las imágenes absorbentes que ofrece el QLED TV se complementan con un diseño minimalista que elimina las distracciones, para permitir a los usuarios sumergirse completamente en su contenido. Este aspecto del diseño se refuerza con el One Invisible Connection, que combina sin problemas los cables AV y de alimentación, así como los de dispositivos periféricos, en un único cable transparente, y el nuevo Ambient Mode, que permite que los televisores muestren imágenes ambientales a fin de integrarse perfectamente con su entorno.
En el futuro, Samsung continuará innovando con interesantes tecnologías para televisores que fomentarán experiencias de visualización aún más enriquecedoras e inmersivas. Estos incluyen Quantum Dots, así como los módulos MicroLED de emisión automática, que la compañía presentó en el CES 2018.