Por Marcelo Sukni, gerente general de SAS Perú, Chile y Ecuador
En 1977, George Lucas lanzó la primera película de lo que se convertiría en la épica serie de Star Wars. En aquel entonces, ¿quién podría haber previsto que esta película generaría el enorme fenómeno cultural que es Star Wars? Películas, congresos, spin-offs, juguetes; tras 41 años la lista continúa. Lo cierto es que estos films se han convertido en parte de la vida de todos, y al mismo tiempo, en un negocio multimillonario.
Tal es la importancia de este fenómeno que, en la década de 1970, Reino Unido eligió a la primera mujer en el cargo de Primera Ministra y para celebrar su victoria, el Partido Conservador publicó un anuncio en el London Evening News que decía: “May the Fourth Be With You, Maggie. Congratulations.”
Este pudo haber sido el primer uso registrado de la frase, pero los fanáticos de La Guerra de las Galaxias en todo el mundo pronto recuperaron el juego de palabras, y el 4 de mayo se convirtió en el Día oficial de la Guerra de las Galaxias.
Pero Star Wars es más que solo una serie de películas o incluso un fenómeno cultural, es un instrumento increíblemente útil para las empresas de todo el mundo por sus lecciones de negocio.
Primero, porque el concepto de Star Wars es tan familiar para casi todos, sin importar edad, que puede usarse como una analogía fácil en la demostración de técnicas. Por ejemplo, dentro de SAS lo hemos usado para mostrar cómo usar el análisis contextual y la visualización de datos básicos. También es una buena metáfora, porque el lenguaje también es reconocible, con muchas frases de La Guerra de las Galaxias que se han trasladado al uso cotidiano.
Las películas y libros de fantasía tienden a seguir un camino desgastado, con tramas centradas en un tema básico del bien contra el mal. Si bien esto también es cierto para Star Wars, las películas también ofrecen algunas lecciones más sutiles, que incluyen:
La importancia de no juzgar por las apariencias. En Star Wars, las cosas rara vez son lo que parecen. A diferencia de, digamos, El señor de los anillos, los «buenos» no son distinguibles por tipo físico. Las alienígenas y los humanos pueden ser buenos y malos, y a veces ambos. Y muchos personajes desafían su apariencia física: piensen en Yoda, por ejemplo.
Sin rendirse, a pesar de las dificultades. La mayoría de los personajes de las películas tienen problemas. Luke, al aprender a dominar sus poderes o Han Solo y Leia, en derrotas para la Alianza Rebelde. Sin embargo, son lo suficientemente resistentes como para superarlos y volver más fuertes.
Confiando en tu instinto. Una de las principales lecciones de Star Wars es aprender a utilizar la Fuerza, el poder que nos rodea a cada uno de nosotros. En los negocios, este instinto nos lleva a confiar en que las cosas se sientan bien hechas y de manera correcta.
Estas lecciones, y muchas otras, pueden obtenerse de las historias y los personajes. Pero el proceso del desarrollo de las películas de Star Wars también ofrecen aprendizajes, aunque puede necesitar más explicación. Por ejemplo:
Las personas pueden ser importantes al inicio de un proyecto, pero el proyecto puede ser más grande que ellos. George Lucas fue en gran medida la fuerza impulsora detrás de las películas anteriores, pero se ha alejado. Incluso el distribuidor original ya no posee los derechos. Pero Star Wars continúa.
Volver a visitar un proyecto más adelante puede agregar valor real. Las tres películas originales de Star Wars fueron creadas a fines de la década de 1970 y principios de la de 1980. Las precuelas no se lanzaron hasta 1999. Lucas decidió volver a Star Wars debido a las mejoras en las imágenes generadas por computadora, y las nuevas posibilidades que esto abrió. Al hacerlo, reintrodujo las viejas películas a una nueva generación de fanáticos, abriendo enormemente la base de marketing.
Las cosas pueden y deben cambiar durante el desarrollo. La historia de la saga Star Wars cambió enormemente durante su redacción. Por ejemplo, cuando se escribió la primera película, la idea de que Darth Vader era el padre de Luke no había sido discutida. Esto surgió más tarde y cambió toda la dinámica. La mayoría de los fanáticos argumentarían que este giro de la trama es esencial.
El Día de Star Wars, no solo es una ocasión para que los fanáticos de la saga recuerden y disfruten, sino también es una oportunidad para que las empresas consideren las lecciones de negocio que ofrece esta serie de películas.