La crisis sanitaria transformó a los centros hospitalarios en prioridad mundial. Su operación ininterrumpida hoy es más crítica que nunca, especialmente en cuanto a garantizar el funcionamiento de salas de urgencias y equipos de ventilación mecánica para enfermos graves.
Implementar la infraestructura TI adecuada es clave en momentos en que la salud de las personas está en juego, señala Vicente von dem Bussche, Gerente de Marketing Internacional de Tripp Lite para Latinoamérica y el Caribe de Tripp Lite. “Son fundamentales las soluciones de protección de energía de grado médico, especialmente desarrolladas para proteger y optimizar el funcionamiento de los equipos de salud contra las fallas de la energía eléctrica”.
Los transformadores de aislamiento, por ejemplo, además de brindar protección contra las fallas de la energía, evitan que equipos médicos como los ventiladores mecánicos o electrocardiógrafos, retornen la corriente parásita o circulación de corriente hacia el paciente que tiene conectado el equipo. Por otra parte, las barras de contactos con tapas de seguridad integradas, con o sin clavijas de Grado Hospital, son ideales para uso médico, ya que cuentan con revestimiento antimicrobiano patentado -eficaz en la inhibición de bacterias y virus- y modelos sin switch, para impedir que sean apagados de manera accidental.
Asimismo, los sistemas UPS, supresores de sobretensiones e inversores y cargadores de corriente de grado médico, están fabricados para la operación crítica de clínicas y hospitales, y son los recomendados para aplicaciones de salud.
Como explica el ejecutivo de Tripp Lite, junto con revisar que la instalación eléctrica sea confiable, es necesario acondicionar un espacio para instalar la infraestructura tecnológica requerida:
- Gabinetes con cerradura, de montaje al piso o a la pared, para evitar el acceso no autorizado, para instalar el servidor y los sistemas de comunicaciones.
- Sistema UPS para proteger los servidores contra las fallas de la energía y proporcionarles tiempo de respaldo, en caso de un apagón.
- Redundancia de energía para aplicaciones de misión crítica: se pueden utilizar sistemas UPS´s trifásicos de redundancia interna N+1, que incorporan módulos adicionales de potencia a fin de asegurar la disponibilidad del UPS; y UPS´s con tecnología paralela redundante, que permiten conectar el UPS principal con otro secundario para proporcionar energía de respaldo. Igualmente, es posible conectar dos UPS de distintas marcas y capacidades, a través de un PDU ATS que integra un switch de transferencia automática.
- Sistema de enfriamiento portátil para lograr la temperatura ideal para el equipo TI.
- Switch administrable de red para incrementar la velocidad y calidad de las conexiones de red; y un switch con tecnología POE (Power Over Ethernet), para proporcionar energía a teléfonos y dispositivos de comunicaciones, entre otros.
- Sistema KVM para controlar, administrar y monitorear el CPU (unidad central de procesamiento), o el servidor.
- Tarjeta de red a fin de monitorear vía remota el control de acceso y seguridad, cambios en temperatura, humedad y el funcionamiento de los sistemas de enfriamiento, UPS’s y PDU’s instalados.
- Baterías adicionales para lograr tiempo de respaldo adicional y/o una planta de energía de emergencia.
“También es importante proporcionar soluciones de conectividad y de energía al personal médico y administrativo, como barras de contactos con supresión de sobrevoltajes y estaciones de carga para tablets, laptops y celulares, de manera simultánea y segura; accesorios como soportes de pantallas para instalar los monitores de los computadores y equipos médicos. Somos parte de una compañía que tiene 98 años de experiencia y, en estos momentos, ponemos a disposición del mercado el desarrollo de productos especializados, fruto de décadas de investigación. Nuestra vida es TI. Somos expertos”, finalizó Vicente von dem Bussche