Reseña del moto g9 play

Desde hace ya un buen tiempo Motorola es un referente en la gama media. Este año ya he tenido oportunidad de probar algunos dispositivos, pero para cerrar el año he tenido la posibilidad de probar el moto g9 play, un terminal económico, pero con características interesantes, así que les contaré mi experiencia.

DISEÑO

El moto g9 play guarda las líneas ya clásicas de la marca. Tenemos un terminal con el panel frontal muy bien aprovechado, ya que los bordes son estrechos alrededor de la pantalla de 6.5 pulgadas, la cual ocupa el 81.6% del panel frontal. Arriba tenemos solo un notch de tipo gota.

Las dimensiones del equipo son bastante correctas, y gracias a los marcos curvados podemos tener un agarre firme a la mano. Es un terminal un poco grueso y pesado, pues tiene un grosor de 9.18 mm, y un peso de 200 gramos. Sin embargo, se siente muy firme, pese a no tener materiales premium en su construcción.

De hecho, en la parte posterior y en los marcos tenemos como material el plástico, aunque valgan verdades se siente muy bien, asemejando un poco al cristal. Justamente aquí en el panel posterior tenemos al centro el módulo de cámaras, el cual es muy discreto y casi no sobresale del resto del cuerpo. El sensor de huellas está un poco más abajo del módulo de cámaras, camuflado en el logo de Motorola, y en una ubicación en la que el dedo encaja perfectamente con el agarre del celular.

Me gusta que tenemos todos los botones del lado derecho, donde el botón de encendido/apagado tiene una textura diferente. Algo que ya no es tan nuevo en los dispositivos de Motorola es la presencia de un botón dedicado para el Asistente de Google, que me parece bien ubicado, ya que está algo más arriba, lo cual evita que lo presionemos de casualidad.

 

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Por cierto, en el marco superior tenemos el jack de 3.5 mm, y abajo tenemos el conector de carga que es USB Tipo C, y el altavoz multimedia.

PANTALLA

Hablemos ahora de la pantalla, que en realidad no resulta ser un gran diferenciador positivo, aunque eso no quiere decir que sea mala.

La pantalla es generosa, llegando a las 6.5 pulgadas. Sin embargo, la resolución solo es HD+, en concreto con 1600 x 720 pixeles, con ratio de aspecto de 20:9, y una densidad de pixeles de 270 ppp. La tecnología elegida es IPS LCD.

Los colores son buenos, aunque a mi gusto le falta un poco más de brillo a esos colores. La falta de resolución normalmente no la notarás en contenido multimedia, a menos que te acerques mucho a la pantalla. Sin embargo, hubiera sido ideal tener una pantalla FullHD+, como en otros dispositivos de la gama media.

Tanto el nivel de brillo como los ángulos de visión son buenos. Así que por ese lado no tendremos mayores problemas para observar contenido en la pantalla. Por software podemos adecuar un poco los colores, con opciones como colores Naturales, Mejorados, y Saturados. Yo siempre usé la segunda opción. Otro aspecto bueno es que la pantalla no retiene mucho la suciedad de las huellas. Finalmente, destacar que tenemos pantalla siempre encendida, pese a no ser un panel OLED o AMOLED.

SOFTWARE

En el apartado del software de momento no hay muchas novedades. Como ya es costumbre en Motorola, tenemos en esencia la misma experiencia de Android muy puro, casi sin personalizaciones, ni añadidos, ni aplicaciones innecesarias.

La buena noticia es que contamos con la última versión de Android, Android 10. En cuanto a la seguridad, tenemos el parche de seguridad a noviembre de 2020, así que por ese lado vamos muy bien con el moto g9 play.

Como siempre, los agregados de Motorola son los famosos Moto Actions, como la posibilidad de abrir/cambiar la cámara girando rápidamente el teléfono, así como la activación del Flash LED sacudiendo el teléfono de forma lateral.

De otro lado, Android 10 nos ofrece funciones como Bienestar Digital y Controles Parentales, pantalla dividida para tener dos apps en pantalla y navegación por gestos. Además, tenemos un modo oscuro que funciona bastante bien pese a ser una pantalla IPS LCD.

RENDIMIENTO Y CONECTIVIDAD

Por el lado del rendimiento tenemos un procesador Snapdragon 662, lo cual es una buena noticia, pues se trata de un chip de ocho núcleos construido a 11nm, que puede llegar a los 2.3 GHz. Lo acompañan una GPU Adreno 610, y 4GB de memoria RAM. La memoria interna es de 64 GB, y se puede ampliar con tarjetas microSD de hasta 512GB.

Con todo esto el rendimiento del terminal ha estado dentro de lo esperado. En la navegación siempre he tenido una buena fluidez, y sin mayores tiempos de espera en la apertura de aplicaciones. Las transiciones son también relativamente fluidas, y a menos que tengas varias apps abiertas o muy pesadas, seguirán corriendo en segundo plano sin cerrarse. Por supuesto, no llega al nivel de fluidez de la gama alta, pero en general va bien.

Con juegos el rendimiento ha estado también dentro de lo esperado, y contamos con Gametime que nos da algunas herramientas para mejorar la experiencia de juegos. Con juegos ligeros va muy bien, y con juegos pesados el rendimiento no ha sido destacado, pero podemos jugar sin problemas. La configuración automática de Call of Duty Mobile pone los gráficos y los cuadros por segundo en nivel medio, dejándonos jugar sin mayores problemas. Claro que, si quieres algo más se soltura, puedes bajar los parámetros. El calentamiento no ha sido para nada un problema. Sin duda el paso de Mediatek, que teníamos en la generación anterior, a Qualcomm ha sido bueno.

Por el lado de la conectividad, tenemos 4G LTE, Wi-Fi b/g/n/ac con Dual Band (2.4 GHz + 5 GHz), Bluetooth 5.0, y GPS.

En cuanto a la biometría, tenemos tanto lector de huellas, como reconocimiento facial. El sensor de huellas funciona bastante bien, no muestra errores y es bastante rápido, algo que ya es característico en Motorola. El reconocimiento facial se vale de la cámara delantera (2D), así que funciona bien con buena iluminación.

CÁMARAS

El moto g9 play cuenta con una variedad de cámaras que nos permiten una buena versatilidad. En la parte posterior tenemos tres lentes. El lente principal es de 48MP, y es muy luminoso, pues cuenta con apertura de f/1.7. Otro lente que tenemos aquí es un lente macro de 2MP con apertura de f/2.4, mientras que el tercer lente es el de profundidad, que también es de 2MP con apertura de f/2.4.

La aplicación de cámara es como la que ya vimos en el moto one fusion. Tenemos algunos modos de captura de imágenes, además del modo automático, como el Modo Noche (Night Vision), el Modo Retrato regulable manualmente, el Modo Panorámico, el Modo de Foto Macro, el Modo de Video Macro, el Modo de Color Directo, el Modo Recorte, el Modo Cinemagrafía, el Filtro Interactivo, Cámara lenta, y cámara rápida. Además, tenemos HDR, optimización de escenas, y un modo Manual que nos permite controlar los parámetros básicos de fotografía, como el ISO, el Balance de Blancos, etc.

Antes de hablar de los resultados, debemos considerar que, en el caso de la cámara principal, se vale de la tecnología Quad Pixel, para juntar 4 pixeles en 1, dándonos fotografías de 12MP, en vez de 48MP, pero con una mejor luminosidad.

Hablando ahora de los resultados, debo decir que me han gustado, especialmente con iluminación favorable. Cuando estamos en la calle, con luz del sol, o en interiores muy bien iluminados, las fotografías tienen buen rango dinámico y un buen nivel de detalle, aunque con colores algo opacos en ocasiones. Aquí debo recomendar siempre mantener el modo HDR en modo automático, y recurrir al zoom digital solo en casos muy necesarios.

 

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La cámara delantera logra buenos resultados, con un buen nivel de detalle, aunque le falta un poco de luz en algunos casos.  Si tenemos cuidado con el enfoque, podemos lograr también un buen rango dinámico. Igualmente funciona bien con poca iluminación, no descendiendo mucho la calidad, aunque claro, se nos va a meter un poco de ruido. Podemos hacer selfies con un gesto de la mano, lo cual nos ayudará bastante. Tenemos modo belleza, pero, como siempre, no hay que exagerar, yo profiero deshabilitarlo.

 

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El modo retrato funciona bien tanto con la cámara delantera como con la cámara principal, aunque mejor con esta última que se ayuda del lente de profundidad, y siempre que no exageres en el nivel de desenfoque. El modo macro hace un buen trabajo para tomar objetos de cerca, aunque el nivel de detalle al hacer zoom a la foto no es tan alto, considerando el sensor de 2 MP.

 

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Ojo que cuando hay poca luz la calidad baja un poco, pero la verdad que no tanto como hubiera esperado, a menos que las condiciones sean muy complejas. Aquí podemos usar el modo nocturno con la cámara principal, pero dependiendo de la situación, los tonos se pueden ir un poco al amarillo.

 

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La grabación de video definitivamente no es el fuerte del moto g9 play. La grabación solo puede ser hasta en 1080p a 60 fps y a 30 fps con la cámara delantera. Los videos se ven bien en redes sociales y en el smartphone, pero en pantallas grandes puede que notes algo de falta de detalle. Sin embargo, la estabilización es buena, al igual que la interpretación de colores, tanto con la cámara delantera como con la cámara principal. Cuando la luz cae si tenemos ruido notorio, y la estabilización se pierde un poco para aparece algo de ese efecto gelatina cuando grabamos en movimiento.

 

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SONIDO

La calidad de sonido es bastante aceptable para la categoría. El moto g9 play no cuenta con un altavoz que lo haga destacar en la categoría por su calidad, aunque sí que ofrece un buen nivel de volumen. Eso sí, la experiencia se puede mejorar con audífonos cableados o bluetooth. Por software tenemos la opción de efectos de sonido, que básicamente es una especie de ecualizador con configuraciones predeterminadas.

BATERÍA

Donde sí destaca mucho el moto g9 play es en la batería, que en este caso es de 5000 mAh. Gracias a esto podemos tener sin problemas dos días de autonomía continua con un uso medio. En términos de pantalla encendida podemos llegar hasta las 10 horas. En ese sentido, no tendrás mayores problemas de autonomía, ya que incluso con usos intensos tienes asegurado un día completo de batería.

El moto g9 play cuenta con carga rápida de 15W, aunque extrañamente el cargador es de 20W. La carga completa se logra en 2 horas aproximadamente. Con media hora de carga podrás tener un 38% aproximadamente, teniendo un 65% de batería en aproximadamente una hora.

CONCLUSIONES

El moto g9 play es un buen terminal de gama media, entre sus aspectos favorables destacan su batería especialmente, aunque no se queda atrás en cuanto a diseño y rendimiento. Las cámaras son sin duda un punto a favor también en el moto g9 play, lo cual me ha sorprendido gratamente.

Sin embargo, hay algunos aspectos por mejorar para su precio, especialmente hablando de pantalla y calidad de sonido. La grabación de video es también algo mejorable, pero en realidad no se aleja mucho del promedio de la gama media.