La seguridad y la salud de las personas es el factor más importante en el desarrollo de la “nueva normalidad” de la sociedad y las industrias. En la gestión empresarial viene siendo clave el diseño y desarrollo de un plan de contingencias y el contar con herramientas preventivas que se articulen con protocolos de bioseguridad, a distinto nivel. Tras superar los más de 90 millones de casos de contagio en el mundo; y estar ante la posible llegada de una segunda ola en el Perú, diversas industrias vienen empleando estrategias para asegurar su operatividad, garantizar el cumplimiento de mejores protocolos de control y detección de síntomas; así como el fortalecimiento de medidas y conductas preventivas tales como el uso de mascarilla, el distanciamiento social, entre otras.
Minería
Este sector incorporó e implementó nuevas tecnologías en sus protocolos de seguridad internos y externos. Según el Director de Proyectos de Hikvision Perú, Gonzalo Aravena, la versatilidad tecnológica permitió modificar rápidamente los softwares que muchas empresas ya venían empleando. “Se sumaron patrones para poder monitorear no solo el empleo de implementos tradicionales de seguridad, sino de otros como el uso de mascarillas, que se impuso en pandemia. También se incorporaron procesos automatizados de medición de temperatura del personal, a través de cámaras de videovigilancia. Las soluciones se implementaron tanto en espacios operativos, como en los campamentos mineros. Eso permitió que este sector sea uno de los primeros en volver a operar, con una mayor capacidad y operatividad”, sostiene el vocero.
Retail
El retail fue uno de los sectores más afectados ante las medidas restrictivas que el Gobierno estableció en el 2020. Durante meses han venido fortaleciendo sus sistemas de control y de accesos debido a la gran afluencia de personas en temporadas claves. Entre las primeras medidas tecnológicas que implementaron para mejorar el tráfico de personas están el uso de un sistema de control de ingreso “sin contacto” como la solución MinMoe; y el uso de cámaras termográficas, para así poder detectar y medir la temperatura a sus trabajadores y proveedores en sus instalaciones; y clientes, posteriormente. Estas tecnologías al identificar a alguna persona con alta u elevada temperatura corporal, emiten una alerta al centro de control. Tras ello, se actúa bajo los protocolos establecidos por cada empresa.
Centros Comerciales tales como el Jockey Plaza, entre otros más, optaron por instalar cámaras termografías en los ingresos peatonales, debido a que este tipo de tecnología puede medir la temperatura de las personas en cuestión de segundos, sin necesidad de contacto físico, lo que permite un mejor control en un mayor volumen de personas, evitando aglomeraciones en los ingresos.
Banca
Durante el 2020, los bancos han sido espacios de alto tránsito, a nivel nacional. Por ello, muchas medidas se han aplicado, en distintos procesos para la atención presencial de clientes. Las tecnologías para la videovigilancia y control de accesos han sido claves para facilitar la prestación de servicios. Cámaras en accesos y espacios de atención, así como la tecnología “MinMoe” para el ingreso a oficinas o espacios laborales han elevado el nivel de bioseguridad, en los ambientes de trabajo y prestación de servicios. El “uso de tarjetas o huellas” han sido innecesarios para el ingreso y control de trabajadores en esta nueva normalidad.
En todas estas industrias, ya se han venido empleando tecnologías para el control de aforos. En función a los marcos regulatorios de las instituciones correspondientes, distintos sectores han ajustado el ingreso de personas a oficinas, plantas, centros de atención al cliente y comerciales. La versatilidad de las cámaras de videovigilancia han sido claves en dicho control, emitiendo alertas en función de la cantidad de personas que ingresan, así como el porcentaje de ocupación de las instalaciones. Eso facilitaba al personal de seguridad y control -de los establecimientos o espacios- ejecutar los protocolos respectivos, según sus reglas internas o la naturaleza del negocio.
“Las medidas de seguridad son válidas para cualquier escenario. Aquellos que pueden estar más densamente poblados, requieren de la toma de medidas de control desde una perspectiva integral, que responda a lo necesario en el tipo de industria o sector. La tecnología, su rápida aplicación y adaptabilidad a los soportes, ha permitido identificar desde el correcto uso de implementos de bioseguridad en colaboradores o personas, hasta la medición de temperatura o control de aforo de un espacio. Su uso es clave en el diseño de una “nueva normalidad” que garantice la seguridad, salud e integridad de las personas y colaboradores, de forma que cumplan de la mejor manera su trabajo o actividad”, sostiene Gonzalo Aravena, Director de Proyectos de Hikvision Perú.