Reseña del Samsung Galaxy S21 Ultra

Hace poco pude probar el Samsung Galaxy S21, el hermano menor de la última generación de la familia Galaxy S, uno de los flagship de Samsung.

Como les conté en ese reseña, el Samsung Galaxy S21 es tal vez uno de los mejores smartphones del año, y ahora he podido probar al hermano mayor de esta familia, el Galaxy S21 Ultra, que otorga añadidos que lo convierten en serio candidato a smartphone del año, por las razones que ahora les voy a contar.

Por cierto, como ya he reseñado el Galaxy S21, en esta reseña no voy a ahondar en aspectos que son comunes, y más bien me voy a centrar en los aspectos diferenciadores de esta versión vitaminada.

DISEÑO

A diferencia del Galaxy S21, la versión Ultra llega para poner toda la carne en el asador, con el mejor diseño en un smartphone Android, en todo sentido. Por supuesto, no es perfecto, pero está muy cerca de serlo.

Para empezar, el Galaxy S21 Ultra cuenta con los mejores materiales en su construcción. La parte posterior es de cristal protegido con Gorilla Glass Victus, siendo especialmente agradable en todo sentido el acabado mate que tiene. Este acabado tiene tres ventajas: (i) es hermoso, (ii) se siente muy suave y cómodo a la mano, (iii) no se ensucia ni atrae las huellas. Por supuesto, al ser de cristal es más delicado que el plástico del S21, pero el que lleve Gorilla Glas Victus nos da un respiro sobre su durabilidad. Los marcos den metálicos, y a diferencia del panel posterior tienen un acabado brillante, además de ser redondeados.

El Galaxy S21 Ultra es un terminal de grandes dimensiones, ya que alberga una pantalla de 6.8 pulgadas en un cuerpo de 165.1 x 75.6 x 8.9 mm. Es grande, cierto, pero no se siente especialmente incómodo en la mano, sobre todo por la ubicación de los botones físicos al operarlo, todos del lado derecho y a la altura adecuada. Eso sí, es más complicado llegar a las esquinas. El peso de 227 gramos sí es algo que se siente más que el tamaño. Cabe destacar que la pantalla poco más del 89% del panel frontal, siendo este valor ligeramente más alto que el del Galaxy S21.

Al igual que el Galaxy S21, tenemos en el marco inferior el altavoz multimedia, y el conector de carga por USB Tipo C, un micrófono, y la ranura para la nanoSIM, no hay espacio para la tarjeta microSD. La protección contra el agua y el polvo es con IP68.

 

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Finalmente, hay que destacar que tuve la suerte de tener a prueba el color Phantom Black, el cual es sumamente elegante, sin brillos o reflejos molestos, y sin problemas de suciedad. En términos de diseño, este es el smartphone más bonito que he tenido en mis manos.

PANTALLA

En el Galaxy S21 Ultra tenemos una pantalla de 6.8 pulgadas, pero con resolución QHD+ y con una ligera curva a los lados. Así que aquí recuperamos la brutal resolución que tuvimos en la familia S20, y que no estaba en el S21 que llegaba a FullHD+, aunque sin mayores problemas. En concreto, la resolución de la pantalla es de 3200 x 1440 pixeles, con un ratio de especto de 20:9, y una brutal densidad de pixeles de 515 PPP.

La espectacular calidad de lo que vemos en la pantalla se debe a toda la tecnología que la metido Samsung. Tenemos un panel Dynamic AMOLED 2X que cuenta con tecnología HDR10+. Samsung nos permite contar con colores vivos y atractivos, pero sin dejar cierta naturalidad. La pantalla más grande lo hace ideal para ver contenidos multimedia, y la tasa de refresco dinámica es de lo mejor que tenemos en este terminal. En este caso la tasa de refresco incluso baja hasta los 10 Hz, y puede subir hasta los 120 Hz. Cabe destacar que esta tasa de frecuencia es adaptativa, y depende de lo que estés haciendo, de modo que cuando es necesario llega a los 120Hz, incluso con la resolución máxima, QHD+, y ya no solo en FullHD+, como ocurría con anteriores generaciones.

 

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El brillo máximo es espectacular, llegando a los 1500 nits en videos HDR. El brillo mínimo es suficientemente bajo como para molestarnos por las noches, sumando además la opción «Eye Comfort», que apaga la luz azul por la noche. No hay que olvidar que aquí también tenemos Corning Gorilla Glass Victus, asegurando una gran durabilidad, y también tenemos el ya famoso Allways on Display, así como los Paneles Edge, que se aprovechan mejor con los bordes curvados.

Por cierto, ahora es compatible con su propio Spen, pero no he tenido oportunidad de probar este accesorio.

SOFTWARE

En este punto no me voy a extender mucho, pues no hay mucho que destacar sobre la review del S21. Tenemos Android 11 potenciado con One UI 3.1, y el parche de seguridad al 1 de febrero de 2021.

El software ocupa una buena parte del almacenamiento, incluyendo principalmente agregados muy útiles, aunque hay otros no lo son tanto. Como punto positivo hay que mencionar todas las opciones de personalización que nos ofrece One UI 3.1.

Además, tenemos añadidos como el lector de noticias UpDay, las rutinas de automatización con Bixby, SmartThings, Samsung DeX, y Knox. De estos destaco mucho DeX, que nos permite convertir el celular en prácticamente una computadora, ya sea a través de un cable de o de forma inalámbrica. Esto es ideal para ser más productivo agregando un teclado y un ratón. Por su parte Knox nos ofrece seguridad desde el núcleo del sistema, así que esto es algo que se agradece siempre.

Dos cosas más que no hay que dejar de mencionar son la gran integración con aplicaciones y funciones de Microsoft, y falta Game Laucher, para mejorar la experiencia con juegos.

RENDIMIENTO Y CONECTIVIDAD

En este apartado no hay muchas diferencias entre toda la familia S21. Sin embargo, la versión Ultra tiene sus ventajas. Para empezar, tenemos aquí como cerebro al Exynos 2100, construido a 5nm, con ocho núcleos hasta los 2.9 GHz (1 x 2.9 GHz Cortex-X1 & 3 x 2.80 GHz Cortex-A78 & 4 x 2.2 GHz Cortex-A55). La GPU es una GPU Mali G78 MP14. En este caso la memoria RAM es de 12GB, y el almacenamiento interno es de 256GB (aunque de momento aquí solo se vende la versión de 128GB), que lamentablemente no se puede ampliar con tarjetas microSD.

No hay mucho que decir, más que resaltar que tenemos un rendimiento bestial, tal como vimos en el Galaxy S21. Además, esas 4GB de memoria RAM adicional hacen que todo vaya todavía más fluido. No hay problemas de ningún tipo con ningún juego. Solo he tenido un poco de calentamiento cuando he pasado mucho tiempo usando la cámara, pero no con el uso de otras apps.

La conectividad es completa, tenemos hasta 5G (aunque en mi caso desactivado) y WiFi 6 (Wi-Fi 802.11 a/b/g/n/ac/ax en las bandas 2.4G+5GHz+6GHz) para la conectividad de datos, Bluetooth 5.2 con BLE, y GPS / AGPS + GLONASS + Beidou + Galileo. Además, tenemos la tecnología Ultra Wide Band, aunque esta solo se puede usar con los pocos terminales compatibles de Samsung para compartir contenido, por ejemplo.

En el apartado de la biometría tenemos un excelente lector de huellas en pantalla y reconocimiento facial. De aquí lo que más destaco es la gran velocidad y precisión del lector de huellas en pantalla.

CÁMARAS

El Samsung Galaxy S21 Ultra tiene cuatro cámaras en la parte posterior. La primera es la cámara ultra gran angular, la cual es de 12MP con apertura f/2.2 y un angular de 120˚, equivalente a 13mm, además de auto enfoque Dual Pixel. Luego tenemos la cámara principal, que es también de 108 MP con apertura de f/1.8 y un angular equivalente de 26mm (83º), además de estabilización óptica. Luego tenemos una de las cámaras telefoto, de 10 MP, apertura de f/2.4, y angular de 35º (70 mm) que nos da un zoom óptico de 3X. La cuarta cámara es la cámara periscópica, la cual es de 10MP, con apertura de f/4.9, y angular de 10º (240mm). Además, hay que destacar que junto a estos lentes tenemos el Lase Autofocus, que nos ayuda a la profundidad de campo. La cámara delantera es de 40MP con apertura de f/2.2, y un angular de 80º (26mm). Sin duda tenemos la mejor combinación para la mejor versatilidad de cámaras.

 

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La aplicación de fotografía ya la conocemos. Hay que destacar los modos propios de la gama alta de Samsung. Por ejemplo, Toma Única que nos permite diferentes tipos de captura con un solo toque. El modo Perspectiva del director, que nos permite grabar con la cámara delantera y una de las posteriores a la vez. El modo Video Retrato, similar al modo que tenemos en fotografía, desenfocando el fondo. Y el modo de Video Profesional, que nos permite controlar los parámetros de la grabación de video y audio.

Como era de esperarse, los resultados son excelentes. Todas las cámaras nos dan resultados sobresalientes con buena iluminación. Todas mis tomas han sido con la configuración por defecto, con HDR y reconocimiento de escenas activado. Así, logramos un buen balance de blancos, buen rango dinámico y una excelente definición. La saturación de colores como es típico en Samsung es un poco alta, pero a mi gusto queda muy bien pues se ve bastante natural. Cabe destacar que si bien el lente principal es de 108MP, por defecto las fotos son en 12MP, ya que Samsung usa un sistema para juntar 9 pixeles en 1 (nona binning). Sin embargo, está la opción de usar los 108 MP si así lo quieres.

 

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En cuanto al zoom, destacan las tomas con 3X y 10X, en ambos casos se trata de zoom óptico, así que tenemos muy buenos resultados. Podemos ir más allá si recurrimos al zoom digital, logran los mejores resultados hasta los 50X. Si bien podemos llegar hasta los 100X, este requiere de mucha estabilización y luz, ya que de lo contrario no podremos enfocar bien y habrá mucho ruido.

 

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El lente ultra gran angular como era de esperarse funciona muy bien, con un angular muy amplio y una corrección en los bordes que deja resultados muy agradables.

 

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De otro lado, la cámara delantera está bastante a la altura de las cámaras posteriores. Tiene un buen angular, siendo importante mencionar que el ángulo se regula de forma automática según la cantidad de personas que están en la toma. Los resultados muestran normalmente una buena exposición, incluso a contraluz.

 

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El modo retrato me ha gustado mucho, especialmente con la cámara posterior, que se ayuda del Laser AF. Así que tendremos un desenfoque de muy buen nivel, con la posibilidad de agregar distintos efectos y dejando la opción de regular el desenfoque antes o después de tomar las fotos.

 

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El modo nocturno del Galaxy S21 Ultra es también muy destacable. Si bien en el modo automático las cámaras del Samsung Galaxy S21 Ultra son muy buenas en situaciones de poca iluminación, cuando la falta de luz ya es muy importante se puede recurrir al modo Nocturno, el cual incluso se activa automáticamente cuando tenemos el reconocimiento de escenas activado. Los resultados con el modo nocturno son muy buenos, ya que se mejora mucha la foto, con mayor iluminación y menos ruido.

 

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La grabación de video con la cámara principal es hasta en 8K a 24 fps, con opciones de 4K a 60 fps o FullHD a 30 o 60 fps. Con la cámara delantera, podemos grabar hasta en 4K a 60 fps. Los resultados son muy buenos, con buenos colores, buen nivel de detalle y una excelente estabilización. Podemos grabar en 4K a 60 fps cambiando entre los lentes sin parar la grabación, incluso pasando de las cámaras posteriores a la delantera. Hay que tener en cuenta que la grabación con el modo super estable es solo a 1080p a 60fps. De otro lado, la grabación en 8K necesita sin embargo algo más de estabilización, y como era de esperarse, ocupa mucho espacio. Hay que destacar que podemos grabar video en HDR10+, y que tenemos zoom digital hasta de 12X.

 

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No hay que olvidar que tenemos grabación de video timelapse o Hyeprlapse y en Cámara Lenta. Con el Hyperlapse, me pareció excelente que se pueda hacer hasta en 4K y con distintos tipos de velocidad, las cuales se pueden elegir manualmente. La cámara lenta puede ser hasta en 720p a 960fps.

SONIDO

La calidad de sonido del Galaxy S21 Ultra es excelente. Tenemos doble altavoz, uno en el marco inferior, y otro la parte superior de la pantalla, en el altavoz de llamadas. Gracias a esto tenemos sonido estéreo de muy buena calidad, incluso con alto volumen. Esto se logra gracias a la colaboración de AKG.

Tenemos algunas mejoras en el audio por software, destacando Dolby Atmos, Ecualizador, Optimizador HQ (32-bit & DSD64/128), y Sonido Adaptativo, estos últimos cuando colocamos audífonos.

BATERÍA

La batería es uno de los aspectos más destacables. Tenemos una batería de 5000 mAh que rinde mucho más de lo que esperaba. Creo que el procesador Exynos 2100 con su construcción de 5nm hacen un excelente trabajo de optimización.

Lo he usado principalmente con la pantalla en FullHD+ y con la tasa de refresco dinámica (hasta 120 Hz). En el tiempo de prueba lo máximo que me ha durado ha sido dos días continuos de uso. Por supuesto, estos dos días fueron días muy ocupados, en los que no tuve mucho tiempo para redes sociales ni juegos, ni fotografías, pero ha sido excelente el rendimiento. En días intensos tendrás para un día completo de uso sin dudas.

La carga rápida por cable es de hasta 25W, y en mis pruebas lo he cargado con un cargador de esa potencia, tardando aproximadamente 1 hora con 30 minutos en cargar de 3% a 100%. Aquí ya depende mucho del cargador que tengas, ya que no viene uno en la caja. Hay que destacar también que tenemos carga rápida inalámbrica (15 W) y carga inalámbrica inversa (4.5W) para que puedas cargar con tu celular accesorios como audífonos.

CONCLUSIONES

Si el Samsung Galaxy S21 me había encantado, el Galaxy S21 Ultra lo supera en algunos aspectos. Sin duda aquí destacan la pantalla por su mayor tamaño y resolución, el diseño con su tacto y el look, aunque es un poco pesado, además de la autonomía que es creo la mejor en un Galaxy S hasta ahora.

Por supuesto, destaca también en aspectos como su extraordinario rendimiento, las cámaras de primer nivel que en este caso aportan un mayor zoom, y el excelente sonido.

Si necesitas una pantalla más grande, una batería mayor, y un zoom de 50X o 100X, el Samsung Galaxy S21 Ultra debe ser tu elección por sobre el resto de integrantes de esta familia de terminales. El Samsung Galaxy S21 Ultra es sin duda el mejor smartphone que Samsung ha hecho hasta la fecha, y serio candidato a mejor smartphone del año.