La pandemia que experimentamos a nivel mundial ha acelerado la demanda de sistemas de información interoperables, es decir, la capacidad que tienen los diferentes sistemas de información y tecnologías para comunicarse e intercambiar datos entre instituciones de salud, médicos y pacientes, reduciendo así la brecha de desigualdad en el sistema de salud peruano. Una realidad que constata Minsait, una compañía de Indra, en su Libro Blanco de Interoperabilidad en Salud, que acaba de dar a conocer en Perú. Este estudio muestra cómo los sistemas interoperables de salud permiten adoptar tecnologías como Big Data o Inteligencia Artificial para ayudar a impulsar la digitalización y reducir la brecha entre los resultados de salud de Latinoamérica y otros países. Para ello, la compañía ha creado un exhaustivo informe con entrevistas a 80 líderes de ocho países de la región, incluyendo Perú, que muestra ya algunos de los pasos que el país ha dado en este sentido para reducir la brecha digital.
El Libro recuerda que en el 2011 se creó en Perú la Plataforma de Interoperabilidad del Estado (PIDE), infraestructura tecnológica para la implementación de servicios públicos por medios electrónicos y el intercambio de datos entre entidades del Estado a través de internet, telefonía móvil y otras tecnologías. En el ámbito de la salud, esta plataforma permite a las entidades mejorar sus servicios mediante la interoperabilidad de sus sistemas. Asimismo, aumenta la seguridad del paciente al permitir el acceso y disponibilidad a los datos clínicos, revisarlo en tiempo real, y mejorar así, la calidad y acceso de la información a nivel nacional. En el país ya se ha implementado el Registro Nacional de Historias Clínicas Electrónicas (RENHICE) y el Repositorio Nacional de Identificaciones Estándar de Datos de Salud (RNIEDS) a través de Ministerio de Salud.
Para seguir fortaleciendo el acceso a la tecnología a nivel nacional, se han desarrollado pilotos en temas de Telesalud en todo el territorio peruano, sobre todo, en zonas remotas y de difícil acceso a través de la Red Nacional de Telesalud, plataforma que interconecta establecimientos de salud con personas que por su condición social o ubicación geográfica están alejadas, logrando lo siguiente:
- Más de 18, 000 atenciones de Telemamografía.
- 48 hospitales principales a nivel nacional.
- Más de 5, 000 atenciones por Teleconsultas.
- 1, 355 establecimientos interconectados a la Red.
- Más de 2, 000 Telecapacitaciones brindadas por los establecimientos de mayor complejidad.
El informe pone de manifiesto que la interoperabilidad se presenta como una oportunidad para afrontar los importantes retos de salud que existen no solo en el Perú sino en Latinoamérica; desde el acceso universal a los servicios de salud, hasta la prevención, detección y tratamiento de enfermedades crónicas y degenerativas cada vez más prevalentes.
Además, destaca el papel clave de los sistemas interoperables como aceleradores de la e-Salud, al permitir la adopción de tecnologías como el Big Data o la Inteligencia Artificial que sirvan de apoyo para extraer valor de los datos y lograr sistemas de salud más sostenibles, en los que se brinde una atención más centrada en el paciente y la información clínica sea un aspecto relevante que guíe las decisiones de los distintos agentes del sistema.
¿Qué mejorar para continuar desarrollando la interoperabilidad en temas de salud en el Perú?
Para Minsait, las principales barreras que impiden avanzar hacia la interoperabilidad están asociadas a la heterogeneidad del dato, el uso de múltiples estándares y la aversión al trabajo en entornos abiertos. La eliminación de estas barreras permitirá al paciente ser dueño de su información y obtener atención personalizada y de calidad; y a los profesionales acceder de forma más sencilla a la información del paciente para un mejor diagnóstico y tratamiento.