El 90% de los expertos en finanzas corporativas considera que los fraudes asociados con gastos corporativos aumentarán durante 2021. El dato fue revelado por Andi McNeal, Directora de Investigación de ACFE (Association of Certified Fraud Examiners) durante la última edición del evento SAP Concur Fusion, realizado recientemente de manera 100% virtual. Ya en 2020 se había experimentado un incremento notable en este tipo de operaciones fraudulentas a partir del inicio de la pandemia: nada menos que un 79%.
“Las personas están sufriendo una gran incertidumbre y mucha presión en diferentes áreas de su vida, por lo que muchas veces buscan, lamentablemente, una salida al agobio económico por este lado”, señaló McNeal. “Por esto las organizaciones necesitan hacer una rápida adaptación de las operaciones, las políticas y los procedimientos de control y auditoría: instaurar una cultura del cumplimiento de las normas e implementar mecanismos efectivos de control de fraude es esencial en estos tiempos”, agregó.
La ACFE estima que una organización sufre pérdidas de alrededor del 5% de sus ingresos anuales por fraudes vinculados a gastos efectuados por los empleados y a errores en las políticas de cumplimiento. Por otra parte, SAP Concur determinó que los gastos relacionados con el manejo de efectivo y con la caja menor representan aproximadamente el 24% de los fraudes dentro de las organizaciones. Estos, en particular, no son fáciles de detectar: se demora entre 15 y 24 meses en hacerlo.
Incluso, el desarrollo de políticas de cumplimiento genera ahorros que van más allá de los fraudes, incluyendo malos entendido, errores honestos o usos deficientes o inexactos de las políticas existentes: “No se trata de un monto que todas las empresas puedan absorber y menos en una circunstancia como esta”, expresó McNeal. “La buena noticia es que el control y el esfuerzo de auditoría realmente funcionan”, completó.