Debido al incremento de los delitos cibernéticos, toda empresa, sea una mype o una gran empresa, debe tomar las medidas adecuadas para proteger la data relevante de una empresa, como la financiera o la tributaria, afirmó Kenneth Bengtsson, presidente ejecutivo de Efact.
Un ciberataque puede causar US$155,000 en pérdidas económicas para las pymes, calcula Kaspersky. A nivel regional, Perú se ubica en el segundo lugar como el país con más ataques dirigidos a pymes.
Ante ello, el ejecutivo Bengtsson detalló los beneficios de seguridad digital con las que cuentan las plataformas diseñadas para la emisión y recepción de facturas electrónicas:
Acceso restringido: Un Proveedor de Servicios Electrónicos desarrolla plataformas e infraestructuras privadas que poseen mayores controles de acceso y restricciones más exigentes que las nubes públicas. No solo poseen altos estándares para la protección de la data, sino que también ofrecen servicios de recuperación de información útiles para sus clientes.
Comprobación del estado de las facturas: Recibir un mail de cuentas falsas que advierta un error en un comprobante o solicite el pago de una factura inexistente crea un riesgo de estafa si no se cuentan con las tecnologías necesarias.
Integridad de la información: Los Proveedores de Servicios Electrónicos no tienen acceso a la información de las facturas que emite cada empresa porque la data se encuentra encriptada. Es por ello que Sunat exige a todos los PSE contar con el ISO/IEC 27001, que certifica los sistemas de gestión de seguridad de la información. Esta acreditación demuestra la integridad en el manejo de los datos de los clientes.
Recepción segura: Las plataformas de los PSE están habilitadas para el envío y recepción de documentos. Esto significa que incluso cuando un cliente envía una factura por mail, en formato PDF, este documento se podrá visibilizar en el sistema, confirmando su veracidad. Usar la infraestructura del proveedor para recibir documentos electrónicos no solo garantiza su autenticidad, sino que además permite que la comunicación tributaria se mantenga en un ecosistema digital mucho más seguro y privado.