Reseña del Sony OLED A80L de 55 pulgadas

Una vez más, he tenido para maravillosa experiencia de tener a prueba un televisor OLED de Sony. Sin duda la marca japonesa es una de las que mejor ha venido implementando esta tecnología de pantallas, y con el A80L, lo ha reconfirmado.

DISEÑO

Siguiendo la tendencia actual del mercado, el Sony A80L llega con un diseño muy minimalista, contando con marcos metálicos muy delgados alrededor de la pantalla, y unas patas bastante delgadas que pasan casi desapercibidas a los lados. El mercado es más ancho en la parte baja, pero en el resto del televisor son casi imperceptibles. Por cierto, llega en color negro.

La pantalla es de 55”, pero en términos de dimensiones totales, estamos hablando de 122.7 cm de ancho, 71.2 cm de alto, y 5.3 cm de profundidad sin las patas. Las patas metálicas se pueden colocar en tres posiciones, la estándar y la estrecha que suben la altura hasta los 73.8 cm, y la posición barra de sonido, que sube la altura a los 78 cm. La profundidad es de 33 cm con las patas, ya que estas sobresalen bastante, así que eso puede ser una limitación para ponerla sobre algunos muebles (los de menos de 33 cm de profundidad). Sin embargo, es compatible con el sistema VESA de 300 x 300, de modo que la puedes colocar montada en la pared. Sin las patas el televisor pesa 17.9 kilos, y cuando le ponemos las patas llega a los 19.5 kilos.

Respecto a las conexiones inalámbricas son WiFi 5 (802.11a/b/g/n/ac, Bandas 2.4 y 5 GHz) y Bluetooth 4.2. Y en cuanto a la conectividad física, tenemos cuatro puertos HDMI, dos de los cuales son HDMI 2.1 para conexiones hasta 4K a 120HZ (uno de ellos es eARC), dos puertos USB, una entrada LAN para internet, y una entrada RF para antena y una para cable, siendo compatible con el estándar de televisión digital terrestre del Perú (ISDB-T/ISDB-TB). También tiene salida digital óptica de audio.

El control remoto es estándar de Sony. Es bastante simple y minimalista, algo que en lo personal me gusta mucho. Está construido en plástico, y funciona con las típicas baterías/pilas AAA. Hay que destacar que cuenta con accesos directos a los principales servicios de streaming (Netflix, Disney+, Prime Video, YouTube, Crunchyroll y Bravia Core). Además, cuenta con micrófono completamente funcional para comandos de voz con el Asistente de Google.

SOFTWARE

Respecto al software, lo primero que hay que destacar es que llega con Google TV, la más reciente versión del software desarrollado por Google para televisores. El funcionamiento es genial, pues no solo nos ofrece toda la inteligencia que ofrece Google, sino que, además, estéticamente es hoy en día el entorno que más me gusta en televisores.

La configuración inicial es sencilla, aunque me parece que con Android TV era más fácil de configurar si tienes un smartphone Android. Aquí hay que iniciar sesión como en cualquier otro dispositivo con una cuenta de Google. Más allá de esto, apenas lo encendemos tenemos un Home que nos ofrece accesos directos a todas las apps que hemos instalado. Además, algo que me gusta mucho es que en una segunda línea tenemos los contenidos que estamos viendo en las distintas plataformas, de modo que no es necesario entrar a cada plataforma para continuar viendo donde nos quedamos, sino que tenemos todo en contenido avanzado a la mano. Esto es genial.

En general, la navegación es muy sencilla e intuitiva, y nos ofrece las opciones de configuración muy bien ordenadas, de modo que podemos hacer ajustes sin tener que salir del contenido que estamos reproduciendo.

Por supuesto, tenemos la posibilidad de usar el Asistente de Google a través de comandos de voz, no solo para buscar contenido o realizar acciones en el TV, sino también para manejar otros dispositivos inteligentes. Los comandos de voz funcionan muy bien, esto no es novedad, pues ya conocemos al Asistente de Google, así que resulta muy práctico usarlo para buscar contenido. Ojo que tenemos Apple Airplay y Apple Homekit.

Por cierto, cuenta con un modo de perfil para niños, de modo que se pueden establecer filtros y restringir aplicaciones, programas y películas, para mantener protegidos a los pequeños de la casa. Incluso, se puede establecer límites de tiempo de encendido.

PERFORMANCE

En principio hay que destacar que estamos ante un panel OLED con resolución 4K (3840 x 2160 pixeles), y que es compatible con HDR10, HLG y Dolby Vision, de modo que está bastante completo para la reproducción de contenido de alto rango dinámico.

Un aspecto particular que hay que destacar de este televisor es el procesador de imágenes XR Cognitive Processor, el cual básicamente nos ofrece una poderosa herramienta de procesamiento de imágenes en tiempo real, mejorando las imágenes para ofrecerlas de forma más realista. Como complemento, cuenta con la tecnología XR OLED Contrast Pro, gracias a la cual los niveles de contraste que ofrece el panel OLED son simplemente alucinantes. Evidentemente, al ser un panel OLED, y sumado a este tecnología, tenemos negros reales, y colores vivos, de modo que la experiencia en escenas de alto contraste es de primer nivel. A esto también contribuye la tecnología XR Triluminos Pro, que permite un amplio especto de colores, con un nivel de saturación bastante adecuado, ya que, si bien son colores ricos, resultan bastante naturales.

Para la claridad y el movimiento, Sony incorpora las tecnologías XR OLED Motion, XR Clear Image y XR 4K Upscaling. Gracias a todas estas tecnologías, las imágenes tendrás movimientos sumamente fluidos (hasta los 120 Hz), pero siempre manteniendo la nitidez y la calidad de la imagen.

Como siempre, he podido probar este televisor con servicios de Streaming, principalmente YouTube, Prime Video, HBO Max, Disney+, y Netflix, resultando en una experiencia de primer nivel. Por supuesto ten en cuenta que la experiencia depende mucho de tu conexión a internet, o de la calidad de la señal que recibes. En mi caso, con una conexión por fibra que anda por los 100 Mbps, los contenidos han cargado rápido, y en 4K, con colores muy ricos, un contraste increíble, y una fluidez maravillosa. Cabe destacar que además de la posibilidad de reproducir contenido de alto rango dinámico, cuenta con IMAX Enhaced, de modo que puedes aprovechar también contenido de ese tipo.

Respecto a videojuegos, lamentablemente por ahora no tengo una PS5, que sería lo ideal, ya que esta tv cuenta con una serie de mejoras pensadas en la consola de Sony. Sin embargo, con una Nintendo Switch me ha ido bastante bien, así que es una pantalla que en genera responde de maravilla a los usos en videojuegos.

AUDIO

Un buen sonido es el complemento ideal de una buena imagen, y este televisor cuenta con un sonido de primer nivel. Al igual que en otros televisores de Sony, en este A80L tenemos también la tecnología Acoustic Surface Audio+, la cual permite reproducir el sonido directamente desde el centro de la pantalla con tres accionadores que se encuentran en la parte posterior del televisor, contando también con dos subwoofers. Así, tenemos un sonido de 50W con 3.2 canales.

En general, el sonido es muy potente, realmente me sorprendió el nivel de volumen que alcanza, y sin distorsionarse ni perder calidad. Cabe destacar que este Sony A80L cuenta con Conversión a Surround 3D, de modo que ofrece sonido en 3D, tanto de forma natural como artificial. Por cierto, tenemos Dolby Audio, Dolby Atmos, y DTS Digital Surround. Además, está la tecnología Voice Zoom 2, la cual permite mejorar las voces, disminuyendo el ruido ambiental para diálogos más claros.

CONCLUSIONES

El Sony OLED A80L es sin duda uno de los mejores televisores OLED que tenemos en el mercado. Como es de esperar en un producto de Sony, destaca por su espectacular calidad de imagen, su magnífico sonido, y su funcionamiento smart, esto último gracias a Google TV, que se confirma como uno de los mejores sistemas para televisores. Sin duda es una de las mejores opciones para el streaming y juegos, aunque su precio no esté al alcance de todos, pero es un producto premium que de ninguna manera te defraudará