Se especulaba que se llamaría iPhone X, y así se llama, pero no se lee equis, sino diez (en romanos). En día de hoy en medio de mucha expectativa, Apple presentó su más reciente smartphones, que si bien resulta traer muchas novedades al mundo de la manzana, muchas de sus novedades ya están presentes en Android desde hace mucho, aunque es cierto que Apple lo que hace lo hace muy bien.
El iPhone X tiene una pantalla de 5.8 pulgadas con tecnología OLED (al parecer fabricada por Samsung), y con resolución de 2436 x 1125 pixeles, que Apple llama Super Retina Display. Lo novedoso de este panel es que cuenta con tecnologías que una calidad de imagen superior en todo sentido, ya que cuenta con soporte para HDR y DoblyVision , además de True Tone. Además, como se esperaba, el panel frontal es casi todo pantalla, ya que son marcos son casi inexistentes, excepto por la parte superior donde tenemos un espacio para la cámara delantera, los sensores y el parlante para llamadas, que también sirve como parlante multimedia.
Otro apartado interesante es el de la cámara principal, que sigue siendo dual, pero en formato vertical. Esta cámara presenta varias mejoras respecto al iPhone 7 Plus. Tenemos doble sensor, uno con apertura de f/1.8 que es angular, y el otro sensor con apertura de f/2.4 en el telefoto (de 2X). Por supuesto, se ha mejorado mucho la capacidad de captar luz con estos sensores, y se ha renovado el flash LED de doble tono, se ha dado un mejor auto enfoque, y un mejor HDR.
En el caso de la cámara delantera, nos encontramos un sensor de 7MP, y ofrece un modo retrato que ya hemos visto en muchos dispositivos en Android. Otra de las grandes novedades es el aprovechamiento de la doble cámara para una mejor experiencia de Realidad Aumentada (AR). Además, la cámara permitirá grabar video en 4K a 60 fps, y cámara lenta a 240 fps en resolución FUllHD.
El iPhone X incorpora como característica en su diseño el metal y esta vez el cristal en la parte posterior. De otro lado, al haberse eliminado casi la totalidad del marco alrededor de la pantalla, también se ha eliminado el sensor de huella dactilar, y ahora el desbloqueo será por Face ID, o mejor dicho reconocimiento de rostro, que promete no poder vulnerarse con fotografías, pues funciona con reconocimiento en 3D.
El procesador que mueve este nuevo iPhone es llamado A11 Bionic, y de acuerdo a lo contado por Apple, «tiene un diseño de CPU de seis núcleos que son un 25 por ciento más rápidos y cuatro núcleos de eficiencia que son un 70 por ciento más veloces que el A10 Fusion, ofreciendo las mejores prestaciones de rendimiento y eficiencia energética del sector. Un nuevo controlador de rendimiento de segunda generación puede usar los seis núcleos simultáneamente, con un 70 por ciento más de rendimiento, de modo que los clientes disponen de más potencia para hacer multitarea, y la autonomía es dos horas mayor que en el iPhone 7. A11 Bionic también integra una GPU diseñada por Apple con un diseño de tres núcleos que aumenta el rendimiento gráfico hasta un 30 por ciento con respecto a la generación anterior. Toda esta potencia hace posible prestaciones increíbles y nuevas de aprendizaje automático, apps de realidad aumentada y juegos 3D inmersivos.»
Finalmente, destacar que tenemos resistencia al agua y carga inalámbrica, a través del estándar Qi, lo cual hace más fácil de usar, ya que no se trata de un estándar propietario, sino de un estándar que ya es muy extendido a estas alturas.
Respecto a la disponibilidad, se dio a conocer que el iPhone X estará disponible en colores silver y space gray en modelos de 64GB y 256GB a US$ 999 y US$ 1149 respectivamente, con una preventa que inicia el 27 de octubre y se entregar desde el 3 de noviembre.