Autor: Gonzalo Aravena, Director de Proyectos de Hikvision Perú
La industria tecnológica en el transcurso del tiempo se ha convertido en el aliado perfecto para cubrir diferentes necesidades en diversos sectores. En principio, una de los principales requerimientos de las empresas estaban centradas en resguardar la seguridad de sus bienes y prevenir situaciones que ponían en riesgo a sus colaboradores y clientes. Esto debido a los altos índices de delincuencia que azotaba el Perú.
Sin embargo, hoy en día el contexto que viene atravesando el país y las medidas graduales por reanudar las actividades económicas, apuntan a otra realidad. Esta ha impulsado a las organizaciones a implementar planes de respuestas eficaces direccionadas, no sólo a resguardar la seguridad, sino también la salud de sus colaboradores, clientes, proveedores, etc.
Una de las principales acciones está orientada en la implementación de tecnologías incorporadas con soluciones deep learning o aprendizaje profundo, que aporten al seguimiento, protección y prevención de las personas. De esta manera, el sector tecnológico, especialmente los dedicados a producir cámaras de video vigilancia, han asumido nuevos retos al adicionar como parte de sus avances ya existentes, nuevas funcionalidades que cumplan determinados protocolos para un retorno seguro a las actividades.
¿En qué consiste esta migración? La transformación del “sólo” registro de imagen a la incorporación de soluciones deep learning ha permitido en este contexto, que las cámaras de video vigilancia, a modo de dispositivos fijos o portátiles, poseen un algoritmo muy avanzado, potente y de alta precisión para la detección y medición de temperatura sobre la superficie de la piel y la supervisión del estado de la mascarilla u otros equipos de protección, evitando falsas alarmas.
Además, estas funcionalidades se vienen incorporando en las soluciones de inteligencia artificial basada en detección de reconocimiento facial, a control de flujo y aforo de personas, análisis de comportamiento de multitudes, control de accesos, entre otros.
La transformación de la tecnología hoy más que nunca, está orientada a contribuir en los protocolos de seguridad y salud de las empresas, a partir de la prevención y reducción de sus impactos, incorporándose como una medida más a incluir en los protocolos de prevención de riesgos laborales.
Finalmente, esta inclusión, además permitirá que las organizaciones puedan centrarse y reforzar sus estrategias de cara a la sostenibilidad de sus negocios y a la reactivación de sus actividades.