Por: Jesús Hung, director de TCL Communications para las regiones de Centroamérica, Caribe y Andina.
¿Qué sería de nuestras vidas sin el smartphone? Definitivamente daría un vuelco de 180°. En este dispositivo, que cabe en la palma de las manos, se almacenan los recuerdos, se resuelven las consultas diarias, se realizan las coordinaciones académicas, se gestionan los trabajos y, por supuesto, se tienden puentes para la comunicación.
Los celulares se encuentran tan inmersos en nuestra realidad que es casi imposible imaginarse despertar un día y no tenerlos cerca. Sin embargo, más allá de estas funciones que ejerce y que nos facilitan alcanzar los éxitos cotidianos, estos equipos evidencian la importancia que tiene la conectividad, la cual promueve el desarrollo de la sociedad y brinda oportunidades que transforman vidas al acercar el conocimiento a quienes más lo necesitan.
Según la Encuesta Nacional de Hogares 2021, el 88.5% de los peruanos que tienen acceso a Internet ingresan a través del celular, consolidándolo como el dispositivo preferido para navegar en la red gracias a sus características que permiten emplearlo en todo momento para mantener la conexión con el entorno.
Es así como en el marco del Día Mundial del Internet, que se celebra cada 17 de mayo desde 2005, buscamos revalorar los beneficios que los diferentes servicios digitales y dispositivos ofrecen, tales como la comunicación, el aprendizaje, la socialización, la consolidación de los negocios, el entretenimiento, entre otros. Asimismo, esta fecha permite destacar el rol que el smartphone posee al ser el potenciador de todas estas actividades, que contribuyen con la democratización del Internet y con la construcción de una sociedad más informada.
Si bien aún queda mucho camino por recorrer para garantizar el acceso del Internet a toda la población, especialmente en las zonas rurales, es sumamente importante el llamado a la acción para que tanto el Estado como la empresa privada sumen esfuerzos para eliminar la brecha que existe en beneficio de todos. En esa línea, las empresas que nos dedicamos a la tecnología, debemos ser las primeras en poner a disposición todos los avances obtenidos para el desarrollo del país.
Las empresas de tecnología debemos estar fuertemente comprometidas con brindar las soluciones más avanzadas en nuestros equipos, haciéndolos asequibles para la mayoría y así garantizar la conectividad y el progreso en todos los niveles, con un objetivo muy claro: seguir construyendo el futuro que queremos y que este se encuentre cada vez más cercano a todos.