Los estragos causados por el Fenómeno de El Niño en nuestro país suelen ser de grandes magnitudes. En un contexto en el que la Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha señalado que en el Océano Pacífico ya imperan las condiciones de este evento, será necesario, tanto en el sector público como privado, tomar las medidas preventivas imprescindibles para garantizar el adecuado funcionamiento de servicios básicos como luz, agua y telecomunicaciones.
Frente a la ocurrencia de una emergencia, la población busca y necesita siempre mantenerse comunicada con sus familiares o personas cercanas que puedan proveer de ayuda. En ese contexto, la firma Vertiv señala que la protección de la infraestructura crítica de telecomunicaciones contribuirá a que la ciudadanía pueda mantenerse en contacto en todo momento.
César López, Telecom Sales Manager, Southern South America (SSA) de Vertiv, resalta las principales medidas preventivas que desde el sector de telecomunicaciones se pueden tomar frente a un posible desastre natural como El Niño; además de las acciones y estrategias urgentes para las empresas involucradas en esta industria.
¿Qué acción debe priorizarse ante una posible emergencia?
C.L.: A nivel de las operadoras de telecomunicaciones, lo que recomendamos como medida preventiva, es la realización de Auditorías especializadas a sus locales técnicos principales. Se tratan de auditorías efectuadas por personal técnico especialista (de empresas como Vertiv) que auditan todos los sistemas eléctricos, sistemas de respaldo y otros sistemas críticos, en todos aquellos locales técnicos que las operadoras de telecomunicaciones consideran como estratégicos dentro de su red, de tal forma que se mantenga las comunicaciones en caso de desastres climatológicos.
¿La prevención en el sector de telecomunicaciones puede llegar a ser costosa si no se hace con tiempo?
C.L.: En Perú ya sabemos que recurrentemente se produce el Fenómeno de El Niño. Hay compañías que sí prevén estrategias para prepararse ante este fenómeno climatológico y destinan recursos; pero no todas lo hacen, y entonces entra a debate el tema del ‘costo-beneficio’. Es decir, qué tanto podemos hacer, qué tantos recursos tenemos para hacerlo y con qué anticipación lo abordamos. Con las auditorías especializadas preventivas, las empresas de telecomunicaciones podrían aminorar posibles riesgos y resolver oportunamente problemas que se puedan presentar en su red cuando ocurran los desastres, donde principalmente son afectados los sistemas de distribución eléctrica.
¿Cuál es la principal infraestructura o activos críticos que deben ser protegidos en caso de un posible Fenómeno de El Niño?
C.L.: Preventivamente la infraestructura civil debe ser reparada, reforzada y protegida. Ante la ocurrencia de lluvias se requerirá que los techos estén protegidos y sin grietas para evitar filtraciones de agua dentro de los locales técnicos, las tuberías y los canales de los drenajes deben ser revisados y limpiados para evitar acumulación e inundación de dichos locales, a fin de evitar daño a los sistemas críticos.
Las vías de acceso a dichos locales deben ser revisados, reparados y limpiados para permitir desplazamiento de personal técnico con equipos de emergencia una vez ocurrido los desastres.
La estructuras y soportes de las torres de telecomunicaciones y de otros sistemas que se encuentran al exterior, deben ser revisados y reforzados preventivamente.
Ante los eventos climatológicos, ¿cómo podrían las empresas salvaguardar la interrupción de su energía eléctrica?
C.L: En potenciales desastres o emergencias climatológicas, lo primero que se afecta es la energía comercial. Es decir, el suministro eléctrico del sistema interconectado nacional podría interrumpirse durante horas y hasta días. Si esto ocurre, las centrales de telecomunicaciones son perjudicadas; para ello, estas estaciones disponen de sus propios sistemas de emergencia con grupos electrógenos y bancos de baterías. Estos se activan automáticamente ante una falla del sistema eléctrico.
En este aspecto radica la importancia de las auditorías técnicas, para detectar y resolver puntos críticos en la infraestructura de telecomunicaciones. Con la ejecución de las auditorías también se conocerá si los equipos de respaldo, como el grupo electrógeno y baterías, están operativos, si es que su capacidad es la adecuada para atender la demanda eléctrica en emergencia. En situaciones de emergencia en desastres hay mucha demanda de comunicaciones y entonces los sistemas empiezan a saturarse, en esa línea, los sistemas críticos consumen más energía, ante lo cual los sistemas de respaldo de emergencia deben estar preparados
En esa situación, se recomienda que las empresas cuenten con un soporte adecuado con mayor autonomía de baterías. Claro está que las baterías existentes también tendrán que ser auditadas mediante instrumentos especializados, para saber cuál es su estado de conservación. Luego de esa intervención, los resultados decidirán si las baterías están en un estado óptimo para ser utilizadas; o si necesitarán ser cambiadas o reforzadas.